Mario Bunge,
en La Ciencia. Su método y su filosofía,
destaca: “A los lógicos y matemáticos no se les da objetos de estudio: ellos
construyen sus propios objetos. Es verdad que a menudo lo hacen por abstracción
de objetos reales (naturales y sociales); más aún, el trabajo del lógico o del matemático
satisface a menudo las necesidades del naturalista, del sociólogo o del
tecnólogo, y es por esto que la sociedad los tolera y, ahora, hasta los
estimula. Pero la materia prima que emplean los lógicos y los matemáticos no es
fáctica sino ideal”.
La
popularidad de las matemáticas, como instrumento de análisis de la mayoría de
disciplinas ó áreas del conocimiento, viene provocando “involuntarias
confusiones” por parte de instituciones reconocidas en el ámbito académico y
hasta de medios dedicados a la difusión del conocimiento. El propósito de éste
ensayo no es precisamente la presentación de los equívocos, pero sí puntualizar
la naturaleza del error.
Acertadamente,
Luis Mejía Marcatinco, profesor de Economía de la UNMSM; en su ensayo: Formación matemática del economista, afirma
que “Los matemáticos razonan acerca de toda clase de preguntas difíciles y de
problemas. Cuando resuelven un problema generalmente crean un poco más de
matemáticas para añadir al acervo creciente de conocimientos matemáticos. Las
nuevas matemáticas pueden usarse juntas con las antiguas para resolver
problemas aún más difíciles. Este procedimiento se ha venido siguiendo desde
hace muchos siglos y la acumulación total de la matemática es bastante mayor de
lo que mucha gente piensa…”
Sin embargo,
la conocida página virtual Wikipedia, afirma que la Economía Matemática “es una
rama de la ciencia económica que utiliza la lógica matemática y sus
herramientas para estudiar hechos económicos”. Y agrega: “La matemática usa
herramientas que abstraen la compleja realidad en una arquitectura más sencilla
y capaz de ser más comprensible. La economía matemática hace uso de esos razonamientos
para explicar algunos razonamientos de muchas de las teorías y de los modelos
económicos”. Finalmente añade: La economía matemática tiende a ser
determinista, exacta y toma todo como una parte totalmente ideal.
A todas
luces, ésta definición tiene una serie de contradicciones en su haber. En
principio, la Economía Matemática no es una
rama de la ciencia económica, sino más bien resulta ser un conjunto de métodos
matemáticos, para demostrar el comportamiento de los agentes económicos ó del
propio fenómeno económico. Nada más falso, cuando Wikipedia afirma que la
economía matemática tiende a ser determinista, exacta y toma todo como una
parte totalmente ideal. Mi respuesta a ello, con la siguiente pregunta: ¿Cómo
es posible que un conjunto de métodos o procedimientos matemáticos tiende a ser
determinista, cuando el objeto de estudio es el evento económico? ¿Será posible
hablar de exactitud en la economía?
Quizás algunas
personas desvinculadas del binomio matemática- economía puedan emplear estos conceptos
como válidos o reales, sin embargo es necesario destacar que la economía,
muchas veces es impredecible, aún con los instrumentos más modernos o
sofisticados. Las sociedades más desarrolladas han caído en graves crisis de
las cuales no ha sido posible reincorporarse. En la actualidad tenemos algunos
casos de “naciones desarrolladas” cuyas crisis económicas han generado graves
secuelas en sus pueblos. Cuando los EE.UU. se constituían en potencia mundial,
tuvo que enfrentar a la peor de sus crisis económicas: La Gran Depresión de los
30. Más de la cuarta parte de su PEA quedó desempleada durante un largo
período, lo que contribuyó a un caos
nacional y por ende a numerosos conflictos sociales. En la actualidad, esta
gran nación viene pasando por una crisis no sólo económica, sino además moral y
social; luego de un largo período de bonanza.
Otro caso es
la situación económica de España, país que durante mucho tiempo ha gozado de
una estabilidad económica envidiable. Hoy sabemos que no sólo la “burbuja inmobiliaria”
fue el motor de dicha crisis, que sigue azotando al pueblo español, obligando
al gobierno de turno a tomar medidas de austeridad sumamente drásticas, casi
“insoportables”, pero quizás necesarias. En Alemania, Polonia, Portugal,
Bélgica y Francia, las protestas populares no se dejan sentir, precisamente
reclamando contra las famosas “medidas de austeridad”, que perjudican al gran
sector de trabajadores. En estos países la economía matemática, no fue capaz de
revelar con exactitud las anomalías o distorsiones que posteriormente
provocaron las referidas crisis. Por ello insisto que los métodos o
procedimientos de la Economía Matemática, surtirán los efectos deseados, cuando
dejemos de ser humanos. La Economía Matemática nos ayuda a comprender con cierta
aproximación (muy relativa) sobre los eventos económicos. En consecuencia,
cuando la Ciencia Económica deje de ser una ciencia social, entonces podríamos
hablar de exactitud y determinismo.
Manuel Jaén
García, en “La Economía Matemática y la controversia sobre la utilización de
las matemáticas en la economía”, 1994, afirma que “La Economía Matemática
incluye varias aplicaciones de los conceptos y técnicas matemáticas a la
economía, particularmente a la teoría económica”. Añade que “El término economía
matemática se utiliza para describir los casos en los que en los trabajos o
investigaciones económicas se emplean técnicas matemáticas, más allá de la
simple geometría, como el álgebra matricial, cálculo diferencia e integral,
ecuaciones diferenciales, ecuaciones en diferencias, teoría de la probabilidad,
etc.” Agrega finalmente: “En consecuencia, no se puede considerar como una rama
expresa de la economía, en el sentido en el que lo son la Hacienda Pública, o
el Comercio internacional. Es más bien, una aproximación al Análisis Económico,
en la que el economista emplea símbolos matemáticos, cuando expone el problema,
y además recurre a métodos y teoremas matemáticos conocidos, como ayuda en su
razonamiento”.
Lo que sí
estamos seguros los economistas es que en la actualidad, no podemos hablar de
economía sino recurrimos a los números. No podemos hablar de modelos
económicos, sino recurrimos a la modelación ecuacional. No podemos resolver un
problema económico complejo, sino realizamos primero un planteamiento
matemático. En consecuencia, las matemáticas serán imprescindibles cada vez más
en la ciencia económica, pero no garantizarán ni exactitudes ni determinarán la
economía, porque sólo son medios de apoyo al economista que necesita arribar a
conclusiones, dentro de una ciencia social. Del grado de rigor y de la
inclusión de más variables, dependerá su acercamiento a la realidad y sus
resultados. Pero no olvidemos que las variables subjetivas son precisamente las
que no se pueden resolver matemáticamente. Surge entonces con mucha
fuerza, el frecuentemente manipulado “Ceteris Paribus”
que no es más que un recurso metodológico al cual los economistas en sus
análisis respectivos, recurren con gran frecuencia para aislar la influencia
que alguna variable en particular ejerce sobre un fenómeno que esté
condicionado por muchos factores.